martes, 1 de julio de 2008

anodinas locales

de mis manos surgen 28 horas cada dia como si fueran tallos de apio o caña oxidada en un pecera de cubos esqueleticos, creciendo como el algarabio, señal de amenaza; miro a mis pies y digo: ''es la gravedad que se esta acabando'' y la señora reluciendo su tinte de sangre-hormiga dice -qué cuantos cabellos para el credito, que cuantos, que si a la 1:30, que si a la 1:30- callese señora y dejemos de fingir que estamos vivos. (esa horrible constumbre de repetir todo lo que se les dice, leen o ven como si los mugidos fueran la energia motora que aliementara sus relojes)

la voz de seguridad: los pulmones resisten mas; pero vaya fume atras que nos esta ahogando los pedos, el señor deja su rastro de humo livido como al paso achacoso de un pan mojado, continua la voz...

-¿y ud que con esa cara de colico, galan de radio?
-no señor, vengo para pago en efectivo -musita entre dientes-
- ¿si? como no, siga!! con ese fino rostro de Nobel en desagües; haberlo dicho antes.

bullicio, bullicio, bullicio lactando como pesadas nubes de pantano digeridas en el espacio.
olor a cadaver de recintos atestados, hedor impercitble de cedulas, reclamos, duplicados, viejos, vasenilla mugrientas y nicotina, pestes generalizadas en escasos pies calculados sobre pasillos sin ventilar con vista al surco, aura o reflejo de los vidrios grasientos.

Mi turno, 788 gritan al pie del polvo de las ventanas, sonido espolvoreo de papeles, lluvia de cuchillos vidriosos y cascos de caballos en llamas ''placida danza bajo la lluvia''

-vengo para saldar esta vida y quedar debiendo la otra
-si señor ¿nombre del predio?
-vertedero sanitario J5
-tiene un sobregiro, mala conducta mi amigo.
-pero si yo, yo...
-Ud nada¡¡ replicó. -seguridad, tratamiento reconstructivo imperial a nuestro amigo fiebre de papel- se le desquebrajaba la piel diciendo esta ultima frase, se le desboronaba y no en una metafora, trozo a trozo como una reliquia de barro inagural en el espectaculo teatral negativo de ''la colectividad'' ¿o era el sol y los bramidos insultantes lo que de daba ese aspecto de radio carbonizada?

fui conducido a traves de una tripa hibernal, con la boca empabonada en pinta labios experimental a una venda caliente en los ojos; la vision artificial le llamaban, proceso nada complejo; ruido de inyecciones de psico-polem estabilizador e incisiones de colores sobre pulsiones sonoras de reconocimiento 3D.

una dos tres cuatro dosis y ya estaba; neurotransmision directa al lente; emitida desde las monedas desaparecidas de la banca, los vertederos de basura trasladados fuera de la ciudad, las meadas en la calle con emision de chascarrillos lacrimosos de ''mi dios le pague'', se acaba la funcion y se largan del recinto con dudas sobre como llegaron los primates a la esfera.

¿un platillo de harina quemada, una escotilla rota en el mercado, una litera destartalada fuera de orbita?

el alarido inconsciente de dios estaba dentro de sus ulceras como una piedra imposible de cagar; debiendonos la vida a todos... ¡una sobredosis inyectada de silencio por favor!

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